Segundo contacto: probamos el nuevo Chevrolet Spark EUV eléctrico, sin contacto

General Motors Uruguay generó una instancia de pruebas en el entorno de La Baguala, para manejar y conocer un poco más al nuevo modelo de la marca, que llega al mercado para disputar espacio a fuertes rivales del segmento.

En presencia de buena parte del equipo de la filial local de la marca norteamericana, con su carismático gerente general Claudio D´Agostini a la cabeza, además de las principales autoridades de Dentsu, su eficaz agencia de comunicación, se concretó esta jornada hace ya algunos días, disfrutando además del impase invernal con un espléndido día de sol y buen clima.

Aprovechando además de la belleza del lugar, ubicado sobre la costa del Río Uruguay. Sin mucho protocolo, la propuesta concreta fue manejar durante una hora, debidamente agendada, dentro de los caminos del Hotel de Campo y conocer más estrechamente los principales atributos de este nuevo Spark.

Vale mencionar que el rescate de la denominación, no es casual. Recordemos que el otrora exitoso y pequeño city car llegó a los mercados en el momento de auge de ese tipo de vehículos pequeños, popularizados en diversos mercados de nuestra región. El Spark tuvo un gran protagonismo en Uruguay, cuando los usuarios se volcaban masivamente hacia ese segmento.

Los tiempos de cambios profundos vienen llegando, y la transformación de los criterios de compra de automóviles pasa por una etapa de renovación, muy rápida. A pesar de todas las dudas y dificultades que implica cambiar hacia los vehículos eléctricos, la realidad es que el segmento crece a pasos agigantados, esencialmente en el mercado local.

Chevrolet busca ubicarse en el liderazgo de la electrificación, y ya ofrece una gama completa y variada de modelos, todos de alta calidad y con tecnología de última generación. Es entonces que entra en escena el nuevo Spark, rescatando un nombre emblemático pero con características y objetivos completamente diferentes, aunque hoy se posicione como el modelo más económico de la familia eléctrica de la marca.

Su aspecto compacto y robusto, con estilo aventurero, genera un impacto agradable que lo diferencia dentro del segmento. Tiene buena altura con respecto al piso y ofrece una serie de atributos bien destacables.

Por ejemplo, utiliza una batería de 42 kWh que ofrece una autonomía de hasta 360 km, con posibilidades de recarga en 35 minutos del 80% de su capacidad, dependiendo del tipo de cargador. El motor ofrece 102 caballos de potencia con un torque instantáneo de 180 Nm y tres modos de conducción.

Con un amplio espacio interior, el baúl, con puerta de apertura lateral, puede alojar hasta 549 litros de volumen de carga, ampliable hasta 916 si se rebaten los respaldos. El diseño interior es elegante, con finos tapizados en asientos y paneles, y con destaque para las pantallas: una de 10.1” para la principal, y otra de 8,8” para el panel de instrumentos.

El volante ofrece varios comandos, y el asiento del conductor tiene ajustes eléctricos, en todos los sentidos.

En marcha

Con este panorama, nos adentramos entre los caminos de La Baguala, que se presentaban bastante blandos tras varios días de lluvia. Naturalmente, el Spark no está pensado para uso offroad, pero en la práctica y con algunos componentes que pertenecen a ese estilo tales como las llantas de 16” de perfil ancho y el buen despeje con respecto al piso, no se intimida a la hora de cruzar un tramo de camino con barro, o trepar un pequeño barranco.

Además de la ausencia de sonidos del motor, el pique es un aspecto disfrutable de este modelo, amén de una notable posición de manejo, con buena altura y una amplia visibilidad.

Aunque no se note su presencia, este Spark EUV cuenta con varios asistentes a la conducción (ADAS) que aportan un componente de seguridad diferencial en el segmento. Tiene cámara de visión exterior 360º, control de crucero adaptativo, asistente de crucero en curva, asistente de mantenimiento de carril y alerta de cambio de carril, frenado autónomo de emergencia y luz alta adaptativa.

Por supuesto, a los que se suman los controles electrónicos habituales, y sus seis airbags de serie.

¿Sin contacto?

Efectivamente. El sistema de llave por aproximación, que bloquea y desbloquea las puertas, en este caso también evita el uso del botón de encendido. Vale decir que alcanza con cerrar las puertas y abrocharse el cinturón de seguridad, para que el motor se active y el vehículo esté pronto para comenzar a acelerar.

Pero además, a ello se suma la falta de un comando para el freno de estacionamiento. Es decir que el sistema se activa y desactiva automáticamente, con el aviso correspondiente escrito en el panel de instrumentos toda vez que ocurre alguna de esas instancias.

En otras palabras, tanto para iniciar el viaje como para finalizarlo, el Spark evita que el conductor deba realizar cualquiera de esas “tareas”. Él se ocupa.

Por otra parte, las funciones del cambio de marcha se gestionan con una de las dos palancas de detrás del volante, la que en un coche convencional correspondería a los comandos del limpiaparabrisas. Con movimientos verticales, se activan la D (drive) y la R (reversa), y con el botón que tiene en el extremo, la N (neutro).

O sea, se trata de la simplicidad y practicidad conductiva, llevada a un nivel muy alto.

En resumen, fue una linda instancia de manejo, con un modelo novedoso, disfrutable en sí mismo y por el entorno en el que nos movimos. Seguramente tendremos otra oportunidad de prueba más profunda, con el uso urbano cotidiano, que nos dará un pantallazo diferente acerca de este nuevo Spark EUV eléctrico.

Para terminar, y tal como decía antes acerca de tratarse del modelo más barato de la gama eléctrica de Chevrolet Uruguay, su precio de venta es de U$S 24.990.

Buenos días.

Compartimos el video institucional de la jornada en La Baguala